Sonríe más que nunca Karina en estos momentos. Porque todo le va bien. Se le abren nuevas puertas en lo artístico y reencauzó su relación de pareja con El Polaco. Hoy ambos disfrutan de un hogar con su hijita Sol. ¿Qué más puede pedir?
-No, nada más. Por supuesto que si vienen más cosas, bienvenido, ja, ja. Es más, me hablaron de algo muy importante que por ahora no quiero revelar porque todavía no está concretado- nos dice.
-Venís de un gira y te vas a otra. No parás.
-Sí, gracias a Dios. Además, llegamos a lugares adonde no íbamos. Fuimos por primera vez a Uruguay, adonde no va ningún grupo de onda santafesina. Fuimos con mucho miedo pero la respuesta fue extraordinaria. Inclusive estuvimos en la frontera con Brasil y de ese país cruzó mucha gente. Me sorprendí como cantaban los temas. Los conocían a todos. Inclusive me pedían los del segundo disco. Es tan lindo lo que pasó con “Sin Vergüenza” que estoy dudando con el sexto disco. Es como que todavía no debería sacarlo.
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