No reniega de su fiereza cuando sale a defender lo que siente y lo que hace.
Aunque a veces la perjudicó, esa forma de enfrentar lo que considera injusto también la hizo madurar y la sostuvo en un medio muy complicado para una mujer.
Su espontaneidad volvió a relucir en esta nota con MDT, que nos muestra una “Princesita” auténtica.
-Si hago un resumen de lo que estoy viviendo ahora, te digo que estoy pasando el momento más tranquilo de mi vida. Es que una está bien cuando hace un balance y tiene todo encarrilado: la familia, la salud y el trabajo. En lo personal no creo que haya más idas y vueltas. Soy una persona muy sensible y te confieso que por momentos me sentí al borde de la locura. Pero ahora estoy muy entera.
-Cuando decís la familia, me imagino que te referís a tu vida con El Polaco. Lo que se ve de afuera es que después de cada situación crítica la pareja sale fortalecida.
-Lo que pasa es que hay dos formas de ver la vida. La nuestra es la de los cristianos. No quiere decir que uno encuentre todo color de rosa. Pero Dios te ayuda a enfrentar cada problema de otra manera. Para que estemos bien con Ezequiel faltaba que cada uno resolviera cosas que le vienen de raíz, de nuestra familia. Esas cosas hacían que nosotros no estuviéramos bien. Por suerte somos muy creyentes. Por eso hoy podemos decir que es el momento más tranquilo de nuestras vidas. Que Ezequiel esté bien, para mí es lo más grande, es por lo que luché durante tanto tiempo. El hoy sale a trabajar y vuelve bien. No está nervioso. Y eso nos da tranquilidad a mí y a nuestra hija.
-Corrieron muchas versiones. Que hubo agresiones, que se separaban y hasta se dijo que dejaban la música.
-No íbamos a salir a hablar de esas versiones, pero a mí –como mujer- me dio mucha vergüenza todo lo que se decía. Por Internet circuló cualquier cosa.
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